martes, 4 de noviembre de 2025

N o v i e m b r e 🍁

 Noviembre siempre llega despacito, como quien toca la puerta y pregunta si aún queda café en la cocina. Se cuela por las persianas, con ese frío que no duele, pero te obliga a buscar abrazo. Huele a hojas mojadas, a calles vacías, a las ganas de quedarse un rato más en la cama.

Es un mes que te recuerda todo lo que no dijiste. Lo que se perdió sin ruido. Lo que aún late aunque ya no esté.Y aun así, noviembre tiene algo bonito. Una calma rara. Una luz bajita que parece que lo entiende todo. Una nostalgia que no pide permiso, pero también una esperanza tímida que te mira de reojo y te dice:

solo falta un poco más para volver a empezar.

En noviembre aprendemos a abrigarnos por dentro, a echar de menos sin enfadarnos, a guardar los recuerdos como quien dobla un jersey de lana.

Porque hay meses que abrazan fuerte,

y noviembre, aunque a veces duela,

siempre te deja un lugarcito para respirar hondo y decir contigo mismo:

seguimos. 🍁🍁🍁

#D e f r e d s

Tu jardín ❤️🌱

 No te olvides de tu jardín.

Ese que nadie ve,

el que riegas con silencios y días malos.


De tu salud mental,

que no es un lujo, es tu casa.

Ese sitio donde duermes de verdad

y donde también tiemblas a veces.


De cuidarte a ti.

Porque no es egoísmo,

es supervivencia.

Es mirarte al espejo y decirte:

voy a estar para mí aunque el mundo corra.


Hay batallas que nadie entiende,

florecitas que nacen sin ruido,

y tormentas que solo tú sabes caminar.


Pero qué bonito cuando te eliges.

Cuando decides ser tu lugar seguro.

Cuando, aunque duela, sigues regando.

Porque a veces crecer

es simplemente no rendirse.

D e f r e d s

jueves, 30 de octubre de 2025

El tono gris de los días

A veces no hace falta decir mucho.

Hay días que se explican solos, 

con una mirada,

con un silencio.

con un gris que no duele del todo,

pero que tampoco se va.


Es ese momento en el que el alma se sienta a descansar,

cuando ya no puede correr detrás de nada

ni huir de lo que siente.


Hay una ternura extraña en ese silencio compartido,

en esos ojos que me entienden sin hablar,

ojos que acompañan,

que esperan conmigo

sin exigirme volver a ser la de antes.


No todo lo gris es pérdida,

a veces solo es parte del camino

de volver a encontrarse.


Esa mirada,

[la mía]

ya no busca,

solo observa.


A veces pienso

que en los ojos se queda todo lo que el alma no sabe soltar.

Y tal vez por eso brillan así:

no de alegría,

sino de verdad.

miércoles, 22 de octubre de 2025

Como si sanar fuera cosa de papeles...

 

Como si sanar fuera cosa de papeles...

Como si el alma también firmara el fin de su tormenta.

Dicen que mejoré, y quizá tienen razón: 

ya no tiembla tanto la voz, 

ya no duele tanto el cuerpo.


Pero dentro… dentro hay un temblor que no se ve.

Camino despacio,
por fuera entera,
por dentro hecha añicos.
No se nota,
porque aprendí a sostenerme
con los trozos.

Hoy me he vestido
con una calma prestada,
y he salido al mundo
como quien finge que recuerda el camino.

Pero la tristeza —esa vieja amiga—
me sigue de cerca,
me susurra que no corra,
que aún hay heridas
que no se curan de día.

Y yo la escucho,
sin miedo.
Porque sé que también ella
tiene algo que enseñarme:

a no rendirme,
a seguir respirando,
aunque el aire pese más
que el corazón.

martes, 21 de octubre de 2025

Ojeras color púrpura...

 “Verla llorar deber ser comparable a contemplar una estrella fugaz y pedir siempre el mismo deseo: que deje de hacerlo.

Se le nota en la mirada que sus párpados tienen mucho más peso que soportar aparte de sus pestañas. Pero está preciosa incluso estando triste.


Al igual que un juguete roto, no se arregla porque dejes de jugar con él, lo mismo pasa con su corazón. Está tan hecho ruinas que hasta convertido en polvo se lo lleva el viento. Lo que no sabe es que, incluso estando en el aire, deja sin respiración.


Tiene esa manera especial de colarse en los pulmones de cualquiera y hacerlo perder el equilibrio por cambiarse de acera y cruzarse con ella intentando forzar un mínimo roce de la piel.


Eso por no hablar de las lágrimas secas que todo el mundo sabe que tiene tatuadas en las mejillas y que intenta camuflar con una sonrisa. Joder, mírala… parece hasta fuerte.  Parece hasta nueva.

Le queda bien cualquier cosa, hasta esas ojeras color púrpura. Le queda bien la tristeza; y es una lástima porque debe ser increíble verla feliz. Y luego está él, que fantasea con invitarla a bailar y que ella le diga que no sabe y qué la suba sobre sus pies y mucho más. Pero no la invita porque duda de si le quedará bien la sonrisa que ha creado para ella y la ve tan frágil que no sabe si aguantará su intento de reparación o acabará con ella”

¿Qué es parar el mundo?

 —¿Nunca has parado el mundo?

 

—¿Qué es parar el mundo?

 

—Parar el mundo es decidir conscientemente que vas a salir de él para mejorarte y mejorarlo. Para poder moverte y moverlo mejor.

 

En ese tiempo debes intentar que nadie ni nada te cree problemas.

Alimentarte de buena literatura, de buen cine y, sobre todo, de la conversación de una única persona que te inspire en este mundo. 

¿Y sabes qué…?

 

—¿Qué? —dije emocionado y fascinado.

 

—Luego el mundo te premia. El universo conspira a favor de los que lo mueven. 

 

Y ésos son los que lo paran.

 

Albert Espinosa

sábado, 12 de julio de 2025

¿Hay alguién por ahí?

 

La soledad más honda no es la de estar sola.

Es la de no ser esperada.

La de sentir que, poco a poco, dejas de existir en las agendas ajenas,

como si hubieras cerrado una puerta que ya nadie se atreve a tocar...


La ternura más pura,

es la de quien se sienta a tu lado en medio de tu tormenta

y no se asusta del ruido.


Y en este silencio que todo lo envuelve,

en este eco de días donde no hay voces,

solo me queda susurrar:


¿Hay alguien por ahí?


N o v i e m b r e 🍁

 Noviembre siempre llega despacito, como quien toca la puerta y pregunta si aún queda café en la cocina. Se cuela por las persianas, con ese...